"El poder se ejerce con humildad": Sheinbaum tras críticas por viajes de Morenistas
Sin mencionar directamente a López Beltrán, Sheinbaum lanzó un mensaje claro a funcionarios y militantes de su partido
La reciente imagen de Andrés Manuel López Beltrán, hijo del expresidente López Obrador, en un hotel de cinco estrellas en Tokio volvió a encender el debate sobre la austeridad dentro de Morena. El tema llegó hasta la conferencia mañanera, donde la presidenta Claudia Sheinbaum no dudó en marcar distancia.
Sin mencionar directamente a López Beltrán, Sheinbaum lanzó un mensaje claro a funcionarios y militantes de su partido: “El poder se debe ejercer con humildad… y aunque algunos en la Cuarta Transformación podrán no estar de acuerdo, esa es mi posición y siempre va a ser”.
El llamado no fue menor. La mandataria subrayó que quienes forman parte del movimiento tienen una doble responsabilidad: la pública y la moral. “La gente tiene derecho a visitar uno u otro país, pero tenemos una responsabilidad política y una responsabilidad que tiene que ver con el movimiento al que representa y los principios que representa. Nosotros, mucho de nuestro pensamiento tiene que ver con el pensamiento jurista: que es que no puede haber gobierno rico con pueblo pobre”, sentenció.
El viaje de López Beltrán, acompañado del diputado Daniel Asaf —exjefe de la Ayudantía presidencial—, se volvió tendencia por las imágenes captadas en el exclusivo hotel Okura de Tokio, donde ambos fueron vistos junto al buffet. Aunque no es el primer caso de este tipo, la polémica creció por tratarse de figuras tan cercanas al corazón del obradorismo.
Y no son los únicos. Varios legisladores han sido señalados por vacacionar en destinos de lujo durante el receso legislativo. Aunque alegan que todo ha sido con recursos propios y sin faltar a sus deberes, el contraste con el discurso de austeridad es inevitable.
Incluso el secretario de Educación, Mario Delgado, reconoció haber salido del país: “Efectivamente, salí unos días con mis propios recursos y sin descuidar mis responsabilidades”, respondió tras ser cuestionado por su viaje a Portugal.
Sheinbaum remató su postura recordando que el poder no solo se ejerce, también se representa. Y en esa representación —dijo— el comportamiento cuenta tanto como las palabras: hay que ser congruentes con los principios.